¿COMO JUGAR CONTRA EL TEMIDO METEBOLAS?

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El inagotable "Chus"

     Hola a todos. Todos nos habremos encontrado alguna vez con algún jugador que crees que no es mejor que tú pero que siempre te gana, si, estamos hablando de los temidos  "METEBOLAS". Hablamos de un jugador defensivo. El típico “metebolas” es el que siempre está en el fondo de la pista y devuelve todo. No tiene un ritmo alto, ni profundidad en sus golpes, ni abre ángulos, pero te hace sufrir mucho.

       Corre por todas las bolas y las pasa a tu lado, y nunca se cansa. Podría quedarse ahí, empujando bolas durante todo el día. En niveles más altos puede tener tiros con más peso, con más efecto, más colocación de la bola y más profundidad, pero la esencia de su plan de juego seguirá siendo igual que antes, devolver todo.

     Creo que a todo el mundo nos ha pasado: esas bolas altas que parece que vienen flotando te hipnotizan. Te quedas ahí, esperando, y no paras de dejar de pensar. El contrario te sigue tirando arriba una y otra vez, parece que te está probando la paciencia. Ese tipo de juego puede ser muy efectivo contra alguien que no pueda con ello. Te saca de quicio, te vuelve loco y te preguntarás:   

"¿Qué hago contra ellos?"

     Te voy a dar cuatro consejos:

     1.- Prepárate para sufrir, ten PACIENCIA: tu paciencia se va a convertir en tu mejor aliado. Contra esas bolas que no dejan de volver, contra ese juego que es pesado, repetitivo y lento, no perder la riendas es lo mejor que puedes hacer. Los “metebolas” son una pared humana. Correrán más que tú, y se cansarán menos que tú, y si lo permites, tu cabeza se irá del partido.

     La preparación mental de antemano es esencial porque el estilo de jugador defensivo lo primero que ataca es tu cabeza. Tienes que salir a la pista consciente de que cada peloteo va a durar mucho. Tendrás que pegar muchas más bolas que normalmente y cuando pienses que hayas hecho un punto ganador, la bola seguirá volviendo alta y profunda  y tendrás que empezar todo de nuevo, ya sé, eso te vuelve loco...

     Los jugadores defensivos tienen mucha continuidad y paciencia. La continuidad es una de sus mejores armas y eso es difícil de derrotar. Hasta niveles profesionales, donde se ganan los puntos con golpes directos, el porcentaje de fallos es lo que decide el rumbo de los partidos. Y un “metebolas” es eso lo que hace: no fallar. Los errores no forzados determinan el resultado más que los golpes espectaculares. Esa es la llave para el juego de defensa… y también contra ello.

     Un “metebolas” te gana porque eliges una táctica equivocada. Como vuelven más y más bolas te empiezas a frustrar y pierdes la paciencia. Te agarrotas y pones más, demasiado esfuerzo. Intentas pegar más fuerte, más profundo, más angulado y al final haces unos golpes impensables para tu nivel. Pero tu contrincante sigue devolviendo todo hasta que tú cometes el fallo o puede que te metas en su juego, lo que también te llevará a una derrota segura.


   Por eso tienes que prepararte bien mentalmente. Buscar toda la paciencia que puedas encontrar y acostumbrarte a la idea de afrontar peloteos muy largos.

    A continuación tienes unos consejos tácticos para tratar de superar a jugadores ultradefensivos:

    2.- Subir tú o atraer al jugador defensivo a la red: Lo que tienes que hacer con un “metebolas” es forzarle a un juego que no es el suyo. Que intente pegar un passing shot, que tenga que tirarte un globo, pegar teniendo menos tiempo, decidirse por unos golpes más precisos. Si te quedas en el fondo de la pista les dejas todo el margen para no fallar y ahí se sienten muy cómodos. Haz más estrechas sus metas. Ya verás como empezarán a precipitarse y a ponerse nerviosos. 

      Si les atraes a volear, que te enseñen como hacen una volea, un botepronto, un remate (mejor si hay sol). Sácales de su lugar cómodo y serán una presa fácil. Tampoco te estoy diciendo que subas a la red en cada punto o les tires una bola alta para que entren, no. Elige bien los momentos y una vez que tengas oportunidad, aprovéchalo. No le dejes dormirte con su ritmo monótono en la pista. Rompe el ritmo y da la vuelta al partido.

     3.- Pégale a la bola con menos fuerza: el “metebolas” aprovecha tu potencia para bloquear la bola. Cuanto más fuerte le pegues más fuerte te lo va a devolver. Y el que se cansa, eres tú. Además acelerándote empiezas a cometer más fallos y eso es lo que ellos quieren. Así que ahorra la energía y desde el fondo de la pista abre los ángulos con golpes de ritmo bajo. Haz a tu adversario trabajar más y cuando tengas un tiro claro, no lo dudes, entra con confianza. 

     4.- Varía el saque: Saca un segundo en vez de un primero de vez en cuando. No intentes ganar el partido con aces. Así les forzarás a generar su propia fuerza, a entrar en la bola, y eso no es su juego. Empezarán a fallar y acelerarse. Y si empujan la bola, estate ahí, esperando para entrar. Y aprovecha la oportunidad de subir. 

     Bueno, con esto espero que la próxima vez que juegues contra un “metebolas” intentes aplicar algo de este post en la pista. Tardarás un tiempo para acostumbrarte a esos cambios. Te sentirás más cómodo teniendo tantas opciones, armas, para utilizarlos en la pista. Y ¡úsalos sin miedo!, pero con cabeza.

      De esta manera concluye esta entrada que creo que nos va a resultar muy interesante a todos. El temido metebolas no lo va a tener tan fácil a partir de ahora, ¿verdad?. Espero que os haya gustado mucho y como digo siempre, si te ha gustado comenta, vas a tardar medio minuto y a mí me hace seguir con mucha ilusión!!!